Como todos los años por estas fechas la "peña Rafa" se reune en casa Migio (Urbies) para dar cuenta del Pote y Cabritu.
Comenzó la concentración en Oviedo a las 12 en punto. Destino Casa Migio con parada obligada en Mieres para arreglar alguna cosilla del pelma de Guillermo.
Sin embargo hicimos una visita a La Bodeguina para tomar unos vininos Serres joven y unos callinos para empezar bien el día. Todo no va a ser conducir. Falo, con mucha prudencia no probo ni vino ni callos, que por cierto entraron muy bien.
Llegamos a Casa Migio a la hora prevista 14,30; los comensales ya estaban allí haciendo gala de una puntualidad prusiana.
Habían "descorchado" un caldo magnifico Reserva Campillo cosecha 2001, datada como excelente, como es sabido el cofrade Ángel se opuso a reconocer el 2001 como excelente, incluso se llegó a apostar y lógicamente retrocedió rápido al ver que ninguno de los allí presentes le apoyo lo más mínimo.
Después de "liquidar" la morcilla de aperitivo nos sentamos en la mesa. Esta vez fuimos 8, faltando por compromisos varios cofrades, entre ellos Alfredo socio y cofrade fundador de esta "Viviendo la buena vida"
El menú fue el de siempre:
El menú fue el de siempre:
Pote
Cabrito
Postre casero
Caldo: Campillo Reserva 2001. Excelente.
Caldo: Campillo Reserva 2001. Excelente.
En el turno de calificaciones, todos calificamos el pote con notable alto, exceptuando, claro está el cofrade Ángel, que a duras penas le dio un aprobado. Este "rebelde" e insensible Ángel dice que "el potaje es echar unas cuantas cosas y ya está", desconoce que el "arte de ligar" alimentos es el más difícil y sobre todo dar con "el gusto adecuado" es bastante complicado. A los buenos cocineros se le conoce por sus guisos.
Total nos quedamos con un notable alto 8,5 por ejemplo.
El Cabritu ya fue otra cosa, los tengo comidos mejores y en el mismo lugar, claro que el día Jueves es poco adecuado a estos menesteres, un viernes y sobre todo sábado son los apropiados. La razón no se explicará aquí por que se supone por todos conocida.
Un aprobado alto, un 6 sería la nota adecuada para el cabritu y en eso se quedó, salvo el cofrade de siempre que suspendió sin miramientos la carne.
El caldo, todo un lujo, la reserva del Campillo 2010 es con mucho uno de los mejores vinos habituales, un claro color tinte rojo, un retrosabor que "llena" toda la boca y sus taninos que lo hacen digestivo, apoyan guisos, carnes fuertes y caza con todo su esplendor.
Por último la compota de manzana casera estaba en su punto, fresca y suelta.
Los espirituosos consistieron en un 1866 que sentó a los comensales como broche adecuado a la reunión.
Como siempre Falo obsequió a los fumadores con un puro. Es una pena que un servidor haya dejado de fumar.
La tertulia estuvo amena y se contaron las peripecias de trabajar en el extranjero, concretamente Brasil. Solo para hombres curtidos.
La "minuta" fue algo dolorosa, claro, adecuada a los vinos y espirituosos. 48 € por "cabeza", la verdad un poco excesiva, pero si miramos bien, los "apoyos" a la comida ascendieron a 200€, osea 25 € por cabeza.
Puede observarse en las fotografías, la profunda meditación del cofrade Ángel examinando los recovecos de su pensamiento y preparando la próxima cita de la peña. Esperamos con espectación, lugar y fecha.